pero sus frecuentes escapadas a la nevera no ayudan a hacer realidad su sueño. El desconocimiento del Inglés también ha sido un gran obstáculo, así que se matriculó en la escuela LingLing. Piensa también que es una gran cocinera, pero por desgracia, todos los platos que cocina son una tragedia. No le molesta, y reparte comida a todos los estudiantes con una amplia sonrisa.